No tengo conocimientos suficientes para analizar con cierta profundidad si el Gobierno Abierto del Ayuntamiento de Madrid alcanza y hasta donde, los conceptos de innovación, transparencia, participación, ..... pero si se aprecia que entre los objetivos que se han marcado, apuestan claramente por ello.
En principio, creo que los ciudadanos pueden tener una herramienta válida para la información y para la gestión de procedimientos que pueden facilitarle su relación con dicho Ayuntamiento, así como para proponer, consultar y votar determinadas actuaciones y decisiones que forman parte de la vida municipal. ¿Hasta qué punto?..... Habría que preguntraselo a los ciudadanos que utilizan estas herramientas para que las valoraran en la práctica diaria.
Indudablemente, es un paso cualitativo importante en la relación ciudadano-Ayuntamiento, que puede facilitarle determinadas gestiones y la posibilidad de proponer, opinar, valorar, las actuaciones del mismo respecto a dicha relación.
Para el Ayuntamiento, supone una apertura al exterior, que por una parte, hace partícipe al ciudadano en algunas decisiones del mismo, informa y hace que se traspasen (no se si en su totalidad) los muros físicos del edificio.
Aplicándolo y relacionándolo en mi trabajo diario en la administración, por una parte, ya se realiza en parte aspectos y conceptos que estamos viendo en este Curso. Trabajo en Becas y Ayudas al Estudio y en los últimos años, se ha producido un salto notable en este ámbito. De pasar de tener que realizar la solicitud en papel y tener que adjuntar un conjunto de documentación, se ha pasado a un proceso informático de la solicitud (incluso habiendose reducido y simplificado), sin tener que aportar documentación ninguna (inicialmente). No solamente para los solicitantes se ha simplificado y agilizado, sino para los componentes de los Negociados de Becas a la hora de finalizar este primer proceso para que en otro nivel, se continúe con el proceso que determina la concesión o denegación provisional de una beca. A partir de aquí, sin embargo, alegaciones, documentación a aportar, incidencias, ....e incluso la posibilidad de interponer un recurso, abandonan el mundo informático y en parte, vuelve a "clásico mundo burocrático" del papel y expediente físico.
Por una parte, se ha producido una innovación, pero manteniendo en determinadas situaciones y casos, procedimientos clásicos de los procesos "de toda la vida" de administración publica.
Personalmente y en una primera aproximación, como "propuesta" de mejora, incidiría sobre una primera fase de información al solicitante. Se que es complicado, porque habitualmente las condiciones que se exigen para la concesión de una beca, suelen ser numerosas, con excepcionalidades según estudios y niveles, con requisitos económicos y patrimoniales. Pero podría hacerse un esfuerzo, quizás en la forma de presentar esa información inicial, para que de forma clara y concisa la persona que se acerca a este ámbito, pueda ver con más claridad lo que en el B.O.E. o en el B.O.J.A. se contempla. Una "traducción", una accesibilidad, a muchas veces, farragoso lenguaje administrativo, que a bastante ciudadanos ( y a veces a nosotros mismos incluso) les supone cuando se enfrentan a solicitar una beca para él o un familiar.
Aplicándolo y relacionándolo en mi trabajo diario en la administración, por una parte, ya se realiza en parte aspectos y conceptos que estamos viendo en este Curso. Trabajo en Becas y Ayudas al Estudio y en los últimos años, se ha producido un salto notable en este ámbito. De pasar de tener que realizar la solicitud en papel y tener que adjuntar un conjunto de documentación, se ha pasado a un proceso informático de la solicitud (incluso habiendose reducido y simplificado), sin tener que aportar documentación ninguna (inicialmente). No solamente para los solicitantes se ha simplificado y agilizado, sino para los componentes de los Negociados de Becas a la hora de finalizar este primer proceso para que en otro nivel, se continúe con el proceso que determina la concesión o denegación provisional de una beca. A partir de aquí, sin embargo, alegaciones, documentación a aportar, incidencias, ....e incluso la posibilidad de interponer un recurso, abandonan el mundo informático y en parte, vuelve a "clásico mundo burocrático" del papel y expediente físico.
Por una parte, se ha producido una innovación, pero manteniendo en determinadas situaciones y casos, procedimientos clásicos de los procesos "de toda la vida" de administración publica.
Personalmente y en una primera aproximación, como "propuesta" de mejora, incidiría sobre una primera fase de información al solicitante. Se que es complicado, porque habitualmente las condiciones que se exigen para la concesión de una beca, suelen ser numerosas, con excepcionalidades según estudios y niveles, con requisitos económicos y patrimoniales. Pero podría hacerse un esfuerzo, quizás en la forma de presentar esa información inicial, para que de forma clara y concisa la persona que se acerca a este ámbito, pueda ver con más claridad lo que en el B.O.E. o en el B.O.J.A. se contempla. Una "traducción", una accesibilidad, a muchas veces, farragoso lenguaje administrativo, que a bastante ciudadanos ( y a veces a nosotros mismos incluso) les supone cuando se enfrentan a solicitar una beca para él o un familiar.
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